Cargando...

El Profeta Adán: El comienzo de la humanidad (parte 2 de 2)

Valoración:

Descripción: Lección de dos partes sobre la creación de Adán y los eventos posteriores. La segunda parte trata sobre cómo ocurrió su expulsión del Paraíso.

Por Imam Kamil Mufti (© 2016 NewMuslims.com)

Publicado el 25 May 2019 - Última modificación 14 Jul 2016

Impreso: 93 - Enviado por e-mail: 0 - Visto: 6,803 (Promedio diario: 3)


Objetivos:

·Aprender sobre la esposa e hijos de Adán.

·Aprender sobre la orden de Allah de prosternarse ante Adán.

·Comprender que Adán y Eva fueron perdonados y nadie carga con los pecados de otro.

·Entender la insistencia de Satanás de desviar a la humanidad y ser conscientes de eso.

Términos árabes:

·Iblís: Nombre árabe para Satanás.

·Yinn: Creación de Allah creada antes que la humanidad a partir de un fuego sin humo. A veces se los llama seres espirituales, genios, banshis, poltergeists, fantasmas, etc.

·Taqwa: Temor de Allah, piedad, consciencia de Dios. Describe un estado de recordar a Allah en todo lo que uno hace.

La esposa de Adán

Prophet_Adam_-_Beginning_of_Humankind_(part_2_of_2)._001.jpgLuego de crear a Adán, Allah creó a su esposa, Hawa o Eva. De ellos Allah trajo a todos los seres humanos (Corán 49:13). Hawa fue creada de la costilla de Adán. El Profeta (que la misericordia y las bendiciones de Allah sean con él) dijo: "Cuiden bien a las mujeres, ya que la (primera) mujer fue creada de una costilla torcida (de Adán), y su parte más curva es la superior. Si insisten en enderezarla, se romperá; y si la dejan, permanecerá torcida. Por eso, cuiden bien de las mujeres" (Bujari).

Los hijos de Adán

Después de crear a Adán, Allah extrajo toda su descendencia de su espina (Corán 7:172). El Profeta Muhammad dijo al respecto: "Cuando Allah creó a Adán, limpió su espalda y salió de ella cada persona que crearía de su descendencia, hasta el Día de la Resurrección"[1].

Allah les ordena a los ángeles postrarse ante Adán

Allah les ordenó a los ángeles prosternarse ante Adán luego de haberle dado vida. Les dijo:

“Cuando lo haya completado e insuflado en él el espíritu que he creado para él, hagan una reverencia [en honor a Mí] ante él" (Corán 15:29; 38:72).

Luego de darle vida a Adán, Allah les ordenó postrarse:

“Pero cuando dije a los ángeles: '¡Prostérnense ante Adán!'” (Corán 2:34; 17:61; 18:50; 20:116).

Cuando Allah ordenó a los ángeles prosternarse ante Adán, Satanás (o Iblís) estaba entre ellos. Los ángeles cumplieron de inmediato, pero Iblís se negó (Corán 2:34; 20:116; 15:30-31). Su primer pecado fue desobedecer la orden de Allah de prosternarse. Iblís nunca fue ángel (Corán 18:50); era un yinn, pero vivía entre los ángeles. En vez de mostrar remordimiento o arrepentirse de su comportamiento, Allah dice:

"Todos se prosternaron excepto Iblís, que se negó y fue soberbio, y se convirtió en uno de los incrédulos" (Corán 2:34).

Allah le dio una oportunidad de arrepentirse, sin embargo, Iblís acrecentó su desobediencia y rebeldía. Para justificar su arrogancia, Satanás argumentó que era mejor que Adán, porque el fuego es mejor que la arcilla. Allah lo expulsó del Paraíso como castigo.

Iblís reconoció que merecía un castigo severo de inmediato, dada su completa incredulidad y desobediencia, pero pidió que su castigo fuese pospuesto hasta el Día del Juicio. Allah, en Su gran sabiduría, le concedió eso.

Iblís anunció su malvado plan de desviar a la humanidad. Dijo con arrogancia a Allah:

“Dijo [el Demonio]: 'Por haberme descarriado, los acecharé para apartarlos de Tu sendero recto. Los abordaré por delante, por detrás, por la derecha y por la izquierda; encontrarás que la mayoría de ellos no serán agradecidos'" (Corán 7:16-17).

Iblís culpó a Allah por su desgracia, a pesar de que Allah no le quitó la libertad de elegir. La sabiduría de Allah dictaminó que Iblís fuese la "máquina" de pruebas de los seres humanos y se le dio poderes extraordinarios sobre las personas, pero su limitación es que no podrá someter a los verdaderos siervos de Allah.

"... Llenaré el Infierno con todos aquellos que te sigan" (Corán 7:18).

Adam y Hawa en el Paraíso

Allah les permitió a Adán y Eva morar en el Paraíso, la mejor residencia. Les dio también permiso para disfrutar de los frutos de ese lugar sin restricción. Sin embargo, se les prohibió comer una fruta en particular:

“Dije: '¡Oh, Adán! Habita con tu esposa el Paraíso, y coman de su abundancia cuanto deseen, pero no se acerquen a este árbol, porque si lo hacen se convertirán ambos en transgresores" (Corán 2:35).

Poco después de comenzar a vivir en el Paraíso, Satanás puso su maliciosa astucia sobre ellos. Ellos eran inocentes y no sabían mentir ni engañar. Satanás les hizo una falsa promesa y usó su inocencia para su ventaja: les sugirió que podían ser como ángeles y vivir eternamente en el Paraíso. Adán y Eva estaban abrumados con el deseo y cayeron en su trampa comiendo del árbol prohibido. En cuanto lo hicieron, sus partes privadas quedaron expuestas (Corán 2:36).Una consecuencia inmediata de la desobediencia es la "caída" de la vestimenta espiritual, que es la Taqwa, y por ello fueron castigados perdiendo la vestimenta física que los cubría.

Satanás primero tentó a Hawa (Eva) y ella luego convenció a Adán de comer del árbol prohibido (basado en un relato en Bujari y Muslim).

Luego de que Satanás sedujo a la pareja para que desobedecieran a Allah, fueron expulsados del Paraíso para ir a vivir sobre la Tierra, luego morir y finalmente ser resucitados para ser juzgados.

En cuanto Adán y Eva se dieron cuenta de la gravedad de su pecado, se arrepintieron y buscaron pedir perdón a Allah. Su actitud frente al pecado fue completamente diferente de la que adoptó Satanás. Él culpó a su Señor por su propia desobediencia y se rehusó a mostrar remordimiento.

Allah les mostró la forma de arrepentirse al enseñarles palabras específicas con las cuales expresarse. Esas palabras fueron:

“... ¡Señor nuestro! Hemos sido injustos con nosotros mismos; si no nos perdonas y nos tienes misericordia, seremos de los perdidos” (Corán 7:23).

La mejor manera de arrepentirse es reconocer el pecado y la mala acción, así es como Allah les enseñó a Adán y Eva como expresar ese sentimiento.

Allah les dio Su perdón y les informó que los humanos iban a residir en la Tierra. Solo aquellos que actúen de la forma correcta podrán entrar al Paraíso.



Notas de pie:

[1] Tirmidhi.

Herramientas de la lección
Mala Mejor
¡Fallido! Vuelve a intentarlo más tarde. Gracias por tu valoración.
Déjenos un comentario o una pregunta

Comente sobre esta lección: El Profeta Adán: El comienzo de la humanidad (parte 2 de 2)

Los campos marcados con asterisco (*) son de llenado obligatorio.

También puede preguntar mediante el servicio de chat en vivo disponible aquí.